Smile, please.

Por ese simple gesto de lejos, por esa canción que aparece en aleatorio en el momento adecuado, por esa mirada que se cruza con la tuya haciendo que salten chispas, por ese guiño que acelera el corazón, por esa palabra dulce, por ese roce disimulado, por esa sonrisa grande y la risa atontada, por ese detalle inesperado, por ese abrazo acogedor tan necesitado, por ese beso que nos hace cerrar los ojos, pero esa buena noticia que nos hace dar un salto...

Por todo aquello que nos hace un poquito más felices cada día. Hay que saber apreciar las pequeñas cosas que nos plantea la vida día a día. Todos los días sale el sol, y, si algún día no sale, siempre sobresaldrá un rayito por entre esa nube que entapona la esperanza.