lunes, 30 de enero de 2012

A sangre fría.

El pueblo de Holcomb está en las elevadas llanuras trigueras del Oeste de Kansas, una zona solitaria que otros habitantes de Kansas llaman “allá”. A más de cien kilómetros al este de la frontera de Colorado, el campo, con sus nítidos cielos azules y su aire puro como el del desierto, tiene una atmósfera que se parece más al Lejano Oeste que al Medio Oeste. El acento local tiene un aroma de praderas, un dejo nasal de peón, y los hombres, muchos de ellos, llevan pantalones ajustados, sombreros de ala ancha y botas de tacones altos y punta afilada. La tierra es llana y las vistas enormemente grandes; caballos, rebaños de ganado, racimos de blancos silos que se alzan con tanta gracia como templos griegos son visibles mucho antes de que el viajero llegue hasta ellos.
Holcomb también es visible desde lejos. No es que haya mucho que ver allí... es simplemente un conjunto de edificios sin objeto,, divididos en el centro por las vías del ferrocarril de Santa Fe, una aldea azarosa limitada al sur por un trozo del no Arkansas, al norte por la carretera número 50 y al este y al oeste por praderas y campos de trigo. Después de las lluvias, o cuando se derrite la nieve, las calles sin nombre, sin árboles, sin pavimento. pasan del exceso de polvo al exceso de lodo. En un extremo del pueblo se levanta una antigua estructura de estuco en cuyo techo hay un cartel luminoso —BAILE—, pero ya nadie baila y hace varios años que el cartel no se enciende. Cerca, hay otro edificio con un cartel irrelevante, dorado, colocado
sobre una ventana sucia...

viernes, 27 de enero de 2012

Tal vez... solo tal vez.

Cuando un chico ame las cosas que odias de ti, cuando esté a tu lado cuando no hay nadie más, cuando te diga que tienes una sonrisa adorable y que va a pasar el resto de su vida contigo. Cuando te sea fiel, cuando se enfade y aún así esté guapísimo, cuando actúe como un caballero y te trate como una princesa, cuando te de los buenos días y también las buenas noches. Cuando pase las Navidades contigo, cuando te roce con ternura, cuando te diga lo importante que eres para él día tras día, cuando te diga cosas dulces solo por verte sonreír, cuando te haga cosquillas hasta que grites que deje de hacerlo porque no puedes respirar, cuando te bese en la puerta sin importar la mirada oculta de tus padres tras la mirilla, cuando cancele sus planes para pasar tiempo contigo, cuando te diga "te quiero" en primer lugar...

...Despiértate, estás soñando.

miércoles, 25 de enero de 2012

Por @Fingerlessglove.

Él estaba allí, sentado en el banco dónde solían quedar. Aún no se hacía a la idea de que ella lo hubiera abandonado. Todos los días, a las cinco y media de la tarde iba allí, se sentaba y observaba a la gente pasar. La misma gente que juntos habían observado años atrás.
Permanecía sentado en el banco durante dos horas. De repente, empezó a fijarse en una de las niñas que jugaban en el parque. Le resultaba familiar, pero no sabía por qué. Siguió observándola y vio que se le acercaba una mujer de unos cuarenta años. Entendió por qué le era familiar, era la hija de una de las hijas de aquella mujer que había amado durante tantos años y que aún amaba, pese a su abandono.
No podía creer que no la hubiera reconocido. Esa niña que tan buenos momentos le había hecho pasar y a la cual vio nacer. Se preocupó. Era una señal de que ya estaba envejeciendo. Había intentado evitar ese pensamiento; le entristecía pensar que le quedaba poco.
Volvió a casa por donde había venido. Conforme iba andando, las calles le parecían más extrañas y desconocidas. Se había perdido de camino a casa. Un camino por el que había pasado miles de veces.

P.d; Quiero aclarar que la de la foto es Audrey, mi mejor amiga la ama.

sábado, 21 de enero de 2012

TE LO DIJE.

¿Sabes qué? Estoy harta. Tenía que decirtelo algún día, y creo que esta es la mejor forma. Sé que no leerás esto porque eres tan inútil que eres incapaz de leerte ni la lista de la compra. Pero allá va.

Querida vecina:
Sé que piensas que eres la más guapa del universo, y que tienes un cuerpo de espanto. ¿Sabes lo que pasa? Que eres una cría. Que no tienes caderas, y las "tetas" que dices tener son fruto de metros y metros de relleno. Que si tienes ese cuerpo es por genética, pero no tienes ningún derecho a reirte de los demás por ello. ¿Sabes qué? Tienes los dientes más horribles que he visto, son enormes, amarillos y deformes. Y cuando te pintas la raya del ojo pareces un monstruo ojeroso. Aprende a utilizar el lápiz de ojos, por favor.
Estoy harta de que vayas por ahí riéndote de los fallos de la gente. Cuando TÚ, querida vecina, eres la primera que los tienes. No estudias, tienes unas notas pésimas, no sabes escribir, te pasas el día vagueando, zorreando, y haciéndote fotos intentando enseñar tus pechos falsos.
Vecina, tienes CATORCE AÑOS, tu futuro depende de lo que hagas hoy. Pero tú sigues riéndote mientras cuentas a tus compañeros que tienes todas las libretas en blanco, y estamos ya a medio curso.
Vecina, tienes CATORCE AÑOS, no eres ni si quiera adolescente, y ya te has follado a... ¿cuántos? ¿tres? ¿cuatro?. Y lo peor es que te los has follado en unas condiciones MUY pésimas. Y ya has tenido un susto de embarazo, del cual te tuvo que sacar un amigo. A tus CATORCE AÑOS.
Sé que no soy la más indicada para hablar de sexo a temprana edad. Pero sabes que intento prevenirte de todas las cosas que te pueden pasar. Sabes que te quiero como una hermana. Sabes que no quiero que cometas el mismo error que yo, que quiero que tengas una vida feliz, con amores y desamores. Que el sexo ya llegará, y si es "hacer el amor", mucho mejor. Cuántas veces he deseado yo que mi primera vez fuera especial...
Cuando digo "amores" me refiero a gente que te quiera. A un chico que se acuerde de ti, que vaya a verte, que te diga "te quiero" y lo sienta de verdad. Un chico que adore tus errores, un chico que te defienda y dé la cara por ti, un chico que no te busque por tus "tetas". Tú ya me entiendes, pero no me haces ni caso. Y así te va.
Tú te empeñas en buscar cuerpos. Solo te fijas en eso. En el cuerpo. Y en la cara. Y luego ¿sabes qué pasa? Que solo te quieren follar, nena. Que solo quieren que les chupes la puta polla, que te tragues su puto semen y darte puerta. Y TÚ NO TE DAS NI CUENTA.
Vecina, tienes CATORCE AÑOS, y tus padres ya saben todo lo que haces. Pero ¿qué has recibido como castigo? Nada. ¿Qué has recibido como castigo por tus malas notas? Nada.
Estoy harta de contarte mis complejos y que tú los sigas criticando. Que me cojas lo que tú dices que es "molla" y te rías. Cariño, YO TENGO CADERAS. Y ¿sabes qué? Que yo no necesito esconder mis complejos con relleno. Porque yo busco a alguien que me quiera como soy, y no por mis pechos.
Te juro que como vuelva a escuchar una risa burlona de ti o de tu amigo, como vuelva a verte reír de alguien, como vuelva a escucharte una sola palabra más donde critiques los fallos de la gente, voy a hacerte leer esto. Y no me importa que me pegues, que me insultes, que no me vuelvas a hablar en la vida, que hables mierda de mí o lo que quiera que vayas a hacer para "contraatacar". Esto es lo que pienso de ti. Y, aunque te duela, tengo razón. Porque esto ya te lo he dicho muchas veces a la cara, pero has pasado de mis consejos, y vas a acabar mal. Muy mal, vecina.
Solo quería recordartelo una vez más. Y tenerlo aquí, escrito y firmado por mí para que, en el futuro, pueda decirte: TE LO DIJE.

viernes, 20 de enero de 2012

Mario Benedetti.

Antes de que el crepúsculo en la noche se convierta,
y se duerma la calle y se entorne la puerta,
a solas con mi pobre madurez inexperta,
quiero que mi demanda se encuentre con tu oferta.

lunes, 2 de enero de 2012

El peor regalo es un animal de compañía.

Te diré una cosa. Los hombres sois la pera. Te convendría probar a ser una mujer por una vez. Probar a ser la que siempre acaba con el culo encima del semen, o la que va al lavabo en plena noche y se encuentra con que el tío no ha bajado el asiento y el culo se le hunde en el agua fría. Además, lo más probable es que el tío no haya tirado de la cadena, porque los hombres se creen que el Hada de la Orina pasa por su casa a las dos de la madrugada y se encarga del asunto, y ahí estás tú, con el culo sumergido en pis, y de repente te das cuenta de que los pies también pisan meado, porque aunque los tíos están convencidos de que tienen una puntería infalible, la mayoría son unos inútiles. Borrachos o sobrios, tienen que regar todo el puto suelo antes de entrar a matar. Llevo toda la vida experimentándolo, cariño. He tenido padre, cuatro hermanos, un ex marido y unos cuantos amigos con derecho a roce cuya existencia no te incumbe a estas alturas... pero tú estás dispuesto a enviar al pobre Frank a la cámara de gas porque resulta que te ha babeado un poco en la zapatilla.

domingo, 1 de enero de 2012

Siglo XXI.

La verdad, no sé cómo hemos llegado a este punto. Vivimos en un mundo donde los niños ya no tienen ilusión por encontrar dos monedas de un euro bajo la almohada, ya no esperan ansiosos la caída de un nuevo diente de leche para la mágica visita del Ratoncito Pérez. Los niños ya no saltan a las 8 de la mañana en las camas de sus padres para bajar todos juntos a ver qué han traído los tres Reyes Magos, ahora, simplemente, van por las calles destrozando las ilusiones a otros niños, destrozando la magia de cada mañana del 6 de Enero. Ya no salen a los parques a jugar a la pelota, al sambori, a saltar a la comba, a correr tras otros niños y decir "tú la llevas".

Ahora fuman. Fuman en los colegios, fuman en cada esquina, fuman en los parques. Salen a la calle, sacan su paquete de cigarrillos, comprado por "vete a saber tú qué gilipollas" y miran a los demás niños con superioridad, juegan a ser mayores. Y no solo fuman tabaco, no, si no otras sustancias. Sustancias que no tienen ni idea de lo que contienen, de dónde vienen ni qué efectos secundarios pueden provocar, simplemente, "está de moda fumarlo".

Sinceramente, respeto completamente a la gente que fuma, ya sea tabaco, chocolate, weed, maría, o como queráis llamarlo. Yo lo he hecho. Lo único que pido es que seáis responsables, que no incitéis a los niños. Sé que esto no va a solucionar nada. No puedo pedir a los padres que controlen a sus hijos, porque es una de las cosas que más odio, que me controlen. Pero, ver a los niños por la calle, con los ojos rojos, risa tonta y dando tumbos, ver a los niños de tan solo 12 años que repiten cada curso, que son expulsados cada día e infinidad de cosas más por querer jugar a ser mayores, por querer sentirse los mejores, me duele.