miércoles, 18 de diciembre de 2019

Cómo te gusta hacerte la tonta.

Mi madre siempre solía decirme: Cómo te gusta hacerte la tonta.
Y recuerdo discutírselo, quedarme en silencio, algunos minutos, pensando en por qué me diría eso. ¡Si yo no me estaba haciendo la tonta!

Pero... ¿sabes? Ahora sí.
Me hago la tonta.
Porque siempre es mucho mejor que piensen que no te enteras. Que lo tienen todo bajo control. Pero  es que yo sé muchas cosas que tú no sabes que sé. Y aunque yo tengo mi corazón en calma, te voy a dejar ser feliz. Y yo voy a ser feliz. Te lo prometo. 

Pero, cariño. Me estoy haciendo la tonta.

Y... créeme, se me da de maravilla.