No
sé lo que es el amor. Creía que sí, que lo tenía muy claro, que lo había sentido
en mi piel, pero me he dado cuenta de que no. Creía que el amor era acariciar y
erizar la piel, creía que era aprender del otro, creía que era reír y llorar,
gritar y huir. Creía que era la sensación de que todo lo demás desaparecía al
estar con él, creía que era renunciar, callar. Me he dado cuenta de que jamás
he estado enamorada. Chico, tras chico, tras chico. Creía que el amor era llamarnos
todos los días. Cielo, cariño. No sé lo que es el amor. Creía que el amor era
una media naranja, pero cada persona ya es una fruta entera. Creía que el amor
era compatibilidad, pero no. El amor es ser tú, y poder ser acompañado. No
estoy incompleta, soy yo. No estoy rota, no tengo porqué arreglarme. El amor no
es eso.
Al principio me he sentido decepcionada, me he cuestionado qué fue todo aquello que sentí. Me he preguntado por qué fui tan estúpida. Pero ahora, respirando, me siento aliviada y feliz, porque algún día descubriré lo que es el amor, tras tanto ensayo-error, y entonces por fin podré ser feliz. Teniendo muy claro que el amor no es complementar, es acompañar.